Es posible que nos suene la palabra narcolepsia, e incluso sepamos qué es. Sin embargo, cuando hablamos de cataplejía, probablemente muchos de nosotros no conozcamos cuál es este trastorno y sus características.
Aunque puede ser una enfermedad impactante y que preocupe, al producirse de forma tan repentina, durante este artículo veremos todos los aspectos necesarios para comprender mejor el trastorno de cataplejía. Además, analizaremos las posibilidades que nos ofrece su tratamiento, para conseguir llevar una vida lo más normal posible.
Contents
- 1 Puntos claves
- 2 Lo que debes saber sobre la cataplejía
- 2.1 ¿Cuál es la causa de la cataplejía?
- 2.2 ¿Cómo se diagnostica la cataplejía?
- 2.3 ¿Cuáles son las consecuencias en la vida diaria de tener cataplejía?
- 2.4 ¿Se puede producir cataplejía en niños?
- 2.5 ¿Cuáles son los síntomas de la cataplejía?
- 2.6 ¿Cómo se relaciona la cataplejía con la narcolepsia?
- 3 Tratamiento y prevención de la cataplejía
- 4 Conclusión
Puntos claves
- La cataplejía es definida como la pérdida brusca del tono muscular, total o parcial, que puede ser inducida por las emociones o por otro tipo de circunstancias que generen sobresaltos.
- Es un trastorno de carácter crónico que conlleva debilidad muscular y suele manifestarse con episodios breves, desencadenados por emociones intensas, como puede ser la risa o el llanto.
- Durante estos episodios, los pacientes manifiestan capacidades respiratorias intactas y los sentidos activados. Sin embargo, según la gravedad de los síntomas, la cataplejía puede ser parcial o completa.
Lo que debes saber sobre la cataplejía
Ante esta enfermedad o trastorno, pueden surgir muchas dudas, ya que es bastante desconocida. Sobre todo, debido a su fuerte vínculo con la narcolepsia, que a veces evita que se hable de la cataplejía como un problema independiente. Durante los próximos apartados, despejaremos las dudas más frecuentes que se dan ante la aparición de esta enfermedad, o ante las sospechas de que pueda estar produciéndose.
¿Cuál es la causa de la cataplejía?
Los estudios realizados indican que la causa principal, tanto de la narcolepsia como de la cataplexia, es el déficit de hipocretina (3), una hormona que se encuentra en el líquido cefalorraquídeo. Esta hormona, también llamada orexina, es de gran importancia en el control de los estados de vigilia y sueño de las personas.
La hipótesis más clara parece indicar que la falta de hipocretina contribuye a que la debilidad y reposo muscular, que se dan durante la fase REM del sueño, ocurran en momentos de vigilia.
La deficiencia de la hormona hipocretina, se cree, es causada por una reacción autoinmune hacia los autoantígenos tribbles homólogos 2. De esta manera, se forman anticuerpos trib 2, que destruyen las neuronas encargadas de la producción de la hipocretina.
Por otro lado, se considera que en los episodios de cataplexia puede entrar en juego la inhibición de las neuronas motoras, localizadas en la médula espinal, lo que originaría la pérdida de control y debilidad de los músculos. Además, se ha relacionado esta enfermedad con otro tipo de trastornos y enfermedades autoinmunes, lesiones encefálicas, problemas vasculares e, incluso, tumores cerebrales. Tampoco podemos descartar que exista un componente genético, como se ha comprobado en muchos casos.
¿Cómo se diagnostica la cataplejía?
La cataplejía suele diagnosticarse durante la adolescencia o juventud. De hecho, se han observado dos picos de edad para la aparición de este trastorno: a los 15-25 años y a los 30-35 años.
Para realizar el diagnóstico, se debe llevar a cabo un estudio del sueño a través de una polisomnografía y una prueba de latencia múltiple del sueño. (MSLT), que consisten en la realización de cinco siestas programadas durante un día. Esto permite que se conozca si el sueño obtenido la noche anterior (prueba de la polisomnografía), tiene algún efecto en la consecución de las siestas diurnas (MSLT). De esta manera, se descartan otras posibles alteraciones y causas de la cataplejía.
Normalmente, se realizan también pruebas de tomografía axial computarizada (TAC) o resonancias magnéticas nucleares. De esta manera, se comprueba que no existan daños cerebrales. Además, es importante para el diagnóstico el propio relato de los episodios de cataplejía que transmita el paciente.
¿Cuáles son las consecuencias en la vida diaria de tener cataplejía?
Cuando no es tratada, la cataplejía puede conllevar problemas tanto físicos como psicológicos. Por un lado, los pacientes corren un mayor riesgo de padecer accidentes, domésticos y laborales. Además, normalmente no se les permite conducir o manejar maquinaria pesada, por el riesgo de sufrir un episodio al volante, y todo lo que ello podría conllevar.
Por esto, es muy importante estar atentos a cuando se producen estos episodios. Debemos intentar que el enfermo no caiga en malas posturas, o se dé golpes fuertes al caer, intentando que caiga en zonas acolchadas, para así evitar daños mayores, en lo posible.
Por otro lado, el padecer este trastorno puede originar problemas psicológicos y emocionales, como episodios de ansiedad ligados a los de cataplejía. Puede resultar muy angustiante el hecho de estar consciente, pero sin que tus músculos reaccionen. Esta enfermedad, también, puede repercutir en las relaciones sociales del paciente, ya que el temor a padecer un episodio de forma espontánea puede llegar a reprimir sus emociones.
Evitar situaciones sociales por el simple riesgo de desencadenar un episodio, pueden llevar a la persona a aislarse y a tener un carácter apático. Por ello, es necesario y recomendable acudir a especialistas psicólogos, que enseñen a manejar este tipo de situaciones y emociones.
¿Se puede producir cataplejía en niños?
Es posible, aunque poco frecuente, que este trastorno se dé en la infancia. No obstante, la cataplejía en niños puede diagnosticarse de forma tardía, ya que tiende a confundirse con otras patologías, como la epilepsia, o con conductas que busquen invocar la atención sobre sí. Por lo general, la cataplejía en los niños se manifiesta, primariamente, en el rostro, produciéndose muecas o caídas de la mandíbula o la extracción de la lengua por fuera de la boca.
Es importante no alarmarse y acudir a especialistas que realicen una exploración neuropsicológica, la cual determinará el origen de estos síntomas, descartando otras posibles causas. También puede diagnosticarse mediante una analítica general, una resonancia magnética cerebral, un electroencefalograma, una ecografía abdominal y un ecocardiografía y/o Holter.
Debemos intentar transmitir calma y tranquilidad al niño o niña, para que no sufra miedo ni ansiedad ante estos episodios.
Debemos tener en cuenta que no es frecuente que los niños sufran desmoronamientos, y que esto solo se dará en los casos más graves, para los cuales deberemos prestar atención, para evitar malos golpes.
¿Cuáles son los síntomas de la cataplejía?
Los síntomas propios de la cataplejía suelen aparecer durante la adolescencia y la juventud. Sin embargo, como hemos podido ver, es posible que aparezcan en otro momento, aunque serían casos extraños. Los episodios de cataplejía son breves y, normalmente, duran entre unos segundos y dos o tres minutos. Pueden darse como reacción a grandes emociones repentinas, como la risa o el miedo.
A diferencia de la narcolepsia, en la cataplejía no se dan episodios de sueño, en los que la persona se queda dormida de forma repentina. Por el contrario, en estos episodios la persona se encuentra completamente consciente durante el ataque, aunque sí podría llegar a sentir sueño o incluso dormirse, debido a la gran relajación de la musculatura. Para poder diagnosticar este trastorno, podemos identificar una serie de síntomas, como pueden ser los siguientes:
- Dificultad al hablar o pronunciar.
- Espasmos faciales, parpadeo excesivo, y muecas.
- Párpados caídos.
- Movimientos la lengua de forma extraña.
- Caída y temblores en la mandíbula.
- Caída de la cabeza.
- Debilidad y temblor en piernas y rodillas.
- Visión borrosa o visión doble.
¿Cómo se relaciona la cataplejía con la narcolepsia?
La cataplejía, aunque puede darse de manera independiente, en la mayoría de casos es un síntoma propio del trastorno de narcolepsia. Además, es uno de los primeros síntomas en aparecer, en relación con esta enfermedad, junto a la somnolencia excesiva y la parálisis del sueño.
Por otro lado, también puede darse narcolepsia sin cataplejía. Sin embargo, lo más habitual es que ambos trastornos se presenten y se traten juntos, debido a que la falta de hipocretina es normalmente un causante de los dos. Debemos destacar, a su vez, la posibilidad de que se presente la narcolepsia sin cataplejía, pero con deficiencia de hipocretina. E, incluso, narcolepsia con cataplejía, pero sin deficiencia de dicha hormona.
La presencia de cataplejía, en el trastorno de narcolepsia, es también un indicador de la gravedad de este (4), como podemos comprobar en la siguiente tabla:
Leve | Moderado | Grave |
---|---|---|
Cataplejía poco frecuente (menos de una a la semana) | Cataplejía una vez al día o cada pocos días | Cataplejía resistente a los fármacos con múltiples accesos diarios |
Necesidad de siestas solo una o dos veces al día | Necesidad de múltiples siestas durante el día | Somnolencia constante |
Poca alteración del sueño nocturno | Alteración del sueño nocturno | Alteración del sueño nocturno (es decir, movimientos, insomnio y sueños vívidos |
Tratamiento y prevención de la cataplejía
Como hemos explicado anteriormente, la carencia de hipocretina es la causa principal de la cataplejía, provocando un desequilibrio en los sistemas motores excitadores e inhibidores que, ante un gran estímulo emocional, disminuyen, produciendo una reducción momentánea de la musculatura. Por lo tanto, el tratamiento enfocado a la sensibilidad de las neuronas que realizan los cambios en la hipocretina es el más eficiente para el combate de la cataplejía.
Fármacos
El medicamento más común para tratar la cataplejía es el oxibato sódico (5), que también se usa para tratar la narcolepsia, ya que ambos trastornos suelen ir de la mano. Mediante este fármaco, se atenúan significativamente los síntomas y la calidad de vida del paciente será mejorada, sin que ello implique una cura definitiva.
Además, se ha comprobado que puede usarse sin problema junto a otros medicamentos indicados para la narcolepsia. Esto permite que el oxibato sódico se utilice como el fármaco principal para la cataplejía. La dosis deberá ser ajustada por un médico, dependiendo de los síntomas y de las características de cada paciente. Se podrá combinar con modafinilo, medicamento normalmente usado para tratar los síntomas de somnolencia asociados a la narcolepsia e, incluso, combinar con antidepresivos. Esto permitirá controlar la enfermedad y otorgar al paciente una vida más tranquila y sana.
Cambios en los hábitos
Además del tratamiento farmacológico, es imprescindible el cambio en los hábitos diarios, especialmente en los de higiene del sueño. De esta manera, será mucho más efectivo el tratamiento y se notarán grandes mejoras. Algunos de estos hábitos pueden ser:
- Se debe mantener un horario de sueño permanente, fijando horas para despertar y acostarse para todos los días de la semana.
- Mantener la higiene en el dormitorio, intentar que sea una zona relajada, con buena aireación y cómoda.
- Dormir las 8 horas recomendadas, lo necesario para sentirse descansado al día siguiente.
- Dormir una o más siestas cortas a lo largo del día.
- Es muy importante realizar ejercicio de manera regular, así como llevar una dieta lo más saludable posible.
- En cuanto a la dieta, es recomendable no comer demasiado por la noche antes de dormir.
- No exponerse en exceso a la luz por las tardes, para habituar al cuerpo al descanso.
- Tomar cafeína u otros estimulantes solo por la mañana, pero nunca por la tarde o la noche.
- No ingerir bebidas alcohólicas.
- No fumar.
Conclusión
Como hemos visto a lo largo de este artículo, la cataplejía es un trastorno de carácter crónico, que puede impedir el desarrollo de una vida normal, en el caso de no ser controlado adecuadamente. Sin embargo, si se detecta y diagnostica a tiempo, junto a su control mediante una serie de hábitos y la toma de medicamentos, no será un obstáculo en nuestra vida diaria.
Por lo tanto, lo más recomendable, siempre, es acudir a médicos especialistas, que puedan realizar un análisis y estudio completo de los síntomas y del paciente, para así diagnosticar este trastorno con la mayor claridad posible. Además, de esta forma se llevará un control periódico del paciente, sus hábitos y la evolución de su cataplejía.
Einzelnachweise (5)
1.
Diccionario Médico [Internet]. Navarra: Clínica Universidad De Navarra [citado 9 de mayo de 2021].
Quelle
2.
Belloch, A., Sandín, B., Ramos, F. Manual de psicopatología. [Internet]. Psicología Santa Cruz Vol. I, 3 Ed. Madrid: Editorial Macgraw-Hill; 2020 [2021].
Quelle
3.
Torterolo, P, Vanini, Go. Importancia de las hipocretinas en la patogenia de la narcolepsia (breve revisión). Rev. Méd. Urug. [Internet]. 2003 Mayo [citado 2021 Mayo 09] ; 19( 1 ): 27-33.
Quelle
4.
Asociación Americana de Psiquiatría, Manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales (DSM-5), 5a Ed. Arlington, VA, Asociación Americana de Psiquiatría, 2014.
Quelle
5.
Poza-Aldea, JJ. Tratamiento integral con oxibato sódico de los síntomas del síndrome narcolepsia-cataplejía. Rev. neurol. (Ed. impr.) [Internet]; 1 ene., 2009 [consultado 9 de mayo de 2021] Vol. 48(1): 27-31.
Quelle